Un vientre plano es algo deseado por muchos hombres y mujeres, algo que no imposible de conseguir, pero tampoco una tarea fácil.
Primero, debemos decir que cada cuerpo y anatomía es diferente, por lo que fuera obsesiones y fuera productos milagro.
Por ejemplo, si eres mamá, tu abdomen ha experimentado un cambio significativo, por lo que se necesita tiempo, trabajo y esfuerzo para recuperar una forma plana.
Aunque trabajándolo se puede obtener este deseado objetivo, debemos saber que cada persona necesita su tiempo, y que ningún abdomen, ni más plano ni más curvo, es el modelo ideal.
Primero, debemos decir que cada cuerpo y anatomía es diferente, por lo que fuera obsesiones y fuera productos milagro.
Por ejemplo, si eres mamá, tu abdomen ha experimentado un cambio significativo, por lo que se necesita tiempo, trabajo y esfuerzo para recuperar una forma plana.
Aunque trabajándolo se puede obtener este deseado objetivo, debemos saber que cada persona necesita su tiempo, y que ningún abdomen, ni más plano ni más curvo, es el modelo ideal.
No obstante, si vuestro claro objetivo es intentar conseguir un vientre plano, aquí tenéis CINCO CONSEJOS que nos cuentan desde SportLife:
1. Bebe agua con moderación.
La recomendación básica es beber ocho vasos de agua al día, pero no conviene abusar, el exceso de agua también puede hinchar tu estómago y dilatarlo. Intenta equilibrar la cantidad de líquido que pierdes cuando haces ejercicio, pesándote antes y después de entrenar. Si has perdido mediokilo, debes reponer medio litro de agua. Si bebes más agua de la que necesitas, o no repartes el líquido a lo largo del día (no vale beber 4 vasos seguidos) puedes provocar la distensión de tus músculos abdominales, y no sólo tendrás más estómago, también puedes acabar con problemas digestivos. Recuerda no caer en los extremos.
2. Elimina los gases.
Los refrescos y demás bebidas con gas no son tu aliado en la búsqueda de un vientre plano. No sólo te hinchan y te dan sensación de pesadez, sino que hacen que se acumulen grasas en la zona abdominal. Por ello, prueba bebidas sin gas como zumos o té.
3. Apuesta por lo integral.
La pasta, los bizcochos, el pan blanco, las galletas, etc. se fabrican con harina blanca o refinada, muy agradable al paladar, pero muy pobre en fibra y nutrientes. La harina blanca o refinada puede provocar hinchazón abdominal. Intenta cambiar tu alimentación, aumentando los alimentos ricos en harina integral (pasta morena, galletas integrales, pan de cereales, etc.) para volver a tener cintura.
4. Deporte aeróbico.
No sólo realizar ejercicios concretos para abdomen harán que pierdas esa grasa abdominal. Prueba con ejercicios en los que se queman bastantes calorías y mueves todo el cuerpo, por lo que también se moverá tu abdomen. Practica un poco de running, o anímate al body combat, una divertida clase cuyos movimientos derivan de una gran variedad de disciplinas, como: Karate, Boxeo, Tae Kwon Do, Tai Chi y Muay Thai.
5. No olvidar abdominales.
En el consejo anterior os hemos recomendado realizar ejercicios en los que se mueve todo el cuerpo, pero aún así no hay que olvidar cuál es la zona que queremos modificar y en la que más tenemos que trabajar. Llegan los abdominales. Debes saber que hay muchísimos tipos de abdominales y combinarlos puede ser un método eficaz. Uno que debes practicar todos los días es la PLANCHA, que consiste en mantener tu cuerpo en el aire apoyando las puntas de los pies y los brazos, tal como esta modelo lo realiza. Empieza aguantando unos 20 segundos y con el paso de los días, aumenta tu tiempo.
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